¿Qué es una Campana de Laboratorio?
Una campana de laboratorio, también conocida como campana extractora o campana de extracción, es un dispositivo de ventilación que se utiliza para limitar la exposición a sustancias peligrosas, incluyendo vapores químicos, gases, polvos y partículas. Estas campanas están diseñadas para extraer el aire contaminado del área de trabajo, filtrarlo y expulsarlo fuera del edificio o recircularlo de manera segura después de su filtración.
Las campanas de laboratorio son un componente esencial en cualquier entorno de investigación o laboratorio industrial donde se manipulan sustancias potencialmente peligrosas. Proporcionan una barrera física y un sistema de ventilación controlada que protege tanto a los usuarios como al entorno del laboratorio, reduciendo el riesgo de exposición a agentes tóxicos y contaminantes.
¿Para Qué Sirve una Campana de Laboratorio?
La principal función de una campana de laboratorio es proteger a los trabajadores del laboratorio de la inhalación de vapores, gases y partículas peligrosas. Esto se logra mediante la captura y extracción del aire contaminado directamente en la fuente, evitando su dispersión en el ambiente del laboratorio. Al mantener un flujo de aire dirigido, las campanas aseguran que los contaminantes sean eliminados de manera eficiente y segura.
Además de proteger la salud de los usuarios, las campanas de laboratorio también contribuyen a mantener un entorno de trabajo limpio y seguro. Al controlar y eliminar los contaminantes en el aire, las campanas previenen la contaminación cruzada de muestras y experimentos, lo que es crucial para obtener resultados precisos y fiables en la investigación científica.